Cuatro detalles de la victoria (22-11) de Elezkano II frente a Irribarria

La fiabilidad del vizcaíno se impuso sobre la irregularidad del guipuzcoano que acusó un inicio pésimo y no pudo dar la vuelta a un partido donde Danel logró el billete a la liguilla de cuartos

Fuente: www.asegarce.com

La máquina arrasó al humano. Danel estará en la liguilla de cuartos del Eusko Label Cuatro y Medio después de protagonizar un encuentro inmaculado donde impuso un ritmo frenético desde el inicio, solo erró una pelota y aprovechó la fragilidad emocional de un Irribarria que salió perdido a la cancha y no supo cómo reaccionar ante el frontón que tuvo enfrente. Bengoetxea VI, Urrutikoetxea y Jaka serán los rivales del zurdo de Aspe que viene de ganar el Masters Codere y atraviesa un estado de forma sensacional.

Una losa imposible de superar

Irribarria acabó el partido con 10 tantos hechos, tres más que su rival, pero con ¡14 pelotas falladas! Danel apenas cometió un error en un encuentro donde triunfó su patrón de juego basado en la eficacia y la simplicidad. Saque largo contra pared y remate. Pim, pam, pum. El vizcaíno arrasó y desquició a su rival merced a un juego exageradamente eficaz.

Un tanto que valió un partido

Con 4-2 a favor de Elezkano II en el marcador se jugó un tanto que resumió lo que fue el partido. Danel, después de un peloteo en el que movió e impidió que su rival pudiera golpear desde parado en el centro de la cancha, se tiró y se golpeó contra la pared para colocar la pelota en el ancho y levantar al público de sus butacas. La señal fue clara: "Para ganarme vas a necesitar jugar al máximo. No te voy a regalar nada". Un mensaje de raza propio del pelotari con una mentalidad privilegiada.

Iker tiró piedras contra su propio tejado

Fuente: www.asegarce.com

Irribarria no jugó el último campeonato del Cuatro y Medio y notó la adaptación a la Jaula. Es un portento cuyas cualidades para jugar a pelota son las apropiadas para marcar una época, pero gestionar la presión del éxito prematuro no está al alcance de cualquiera. Iker realizó golpes de genio, pegó con la volea y consiguió varias dejadas de mérito, pero cada vez que intentó remar a contracorriente e iniciar la remontada tiró pelotas muy sencillas por exceso de confianza. Año nuevo, ideas nuevas...

La batalla psicológica la ganó la experiencia

Por primera vez en lo que va de campeonato no se enfrentaron pelotaris de distintas empresas en la cancha. En Tolosa no huevo botilleros y los protagonistas no recibieron ayuda externa durante el partido. Elezkano II, con una constancia insultante y un poderío mental propio de quien confía en sus facultades hasta el final, consiguió la victoria ante un Irribarria incapaz de variar su forma de juego y superar sus errores. Danel tiene menos recursos como pelotari en términos globales, pero obliga a sus rivales a completar partidos casi perfectos para batirle.